Cuando un producto o servicio es contratado de manera permanente, en muchos casos, es más fácil y cómodo automatizar la gestión de facturas. Este proceso permite controlar el flujo de efectivo, lo que hace que la empresa ahorre tiempo en este procedimiento.
La automatización de facturas es una tendencia cada vez más visible en las empresas, ya que permite la optimización de los equipos de trabajo. Lo importante es contar con la tecnología necesaria para que este proceso se lleve a cabo.
Este tipo de acciones es muy útil realizarlas cuando diaria, semanal o mensualmente se tiene que repetir la misma factura, en la cual solo se debe modificar la fecha y el número. Además, dentro de otros beneficios, destaca la reducción del error humano.
Este proceso tiene diferentes etapas, las cuales son fundamentales para su correcto funcionamiento. Lo primero que se hace es entender los requerimientos de clientes, cuáles son sus necesidades. Luego, se prepara la etapa de desarrollo, donde se da a conocer el software, la administración y gestión de los servicios.
A continuación, se pone a disposición del cliente la solución de BST, la cual tiene que ver con una célula operacional de automatización de procesos, que ejecuta esta función en el ecosistema tecnológico.
Para que esto se lleve a cabo, hay un equipo especializado en implementar y monitorear que todo funcione correctamente, y si falla algo, existe un equipo de soporte.
Una vez que se definieron los objetivos, hay un marco de ejecución en el cual se basa una metodología de funcionamiento, se fijan los propósitos y lineamientos con el cliente y se entrega un presupuesto.
