Utilizar la tecnología como partner para automatizar procesos, es un elemento fundamental para ahorrar costos en una empresa. Generalmente, los procedimientos que pueden ser realizados por un tercero, son aquellos repetitivos, estandarizados y de alto volumen.
Para eso, un Robotic Process Automation (RPA), es un gran aliado para este tipo de funciones, ya que automatiza procesos por medio de asistentes digitales que emulan el uso de las aplicaciones de negocios tal y como si fueran realizadas por seres humanos.
Esta herramienta ayuda en tareas como: order to cash, conciliación de cuentas, cierres mensuales, cálculo de impuestos y generación de reportes, entre otras. Además, disminuye costos, incrementa la eficiencia, aumenta la productividad, garantiza cero errores, hace más rápidos los procesos, promueve nuevos productos o servicios y proporciona trabajadores 100% enfocados en sus labores en la empresa.
El RPA se monta sobre las interfaces de los usuarios, lo cual permite una rápida adopción de la herramienta, además de significar riesgos mínimos para su implementación. Esto no solo ayuda a los mismos procesos, sino que se traduce en la aceleración de la transformación digital de las distintas áreas de las empresas.
A pesar de sonar como una herramienta que no puede dejar de faltar en cualquier compañía, lo cierto es que el RPA es una herramienta que coincide específicamente con ciertas funciones, dentro de las que destacan las siguientes:
Verticales:
Horizontales: