El exceso de datos de las personas, clientes y de las mismas empresas, muchas veces puede significar un dolor de cabeza para las organizaciones. Teniendo en cuenta que la información es fundamental para analizar comportamientos y patrones, es crucial que las industrias se adapten a la idea de alojar sus datos en la nube, garantizando así su resguardo y protección.
Ahora bien, al trasladar datos a la nube, las compañías deben comprender a dónde los están moviendo, según cada caso; los tipos de datos que se están manipulando y los recursos de red disponibles, entre otros elementos.
Migrar a la nube trae consigo múltiples beneficios en términos de servicios y recursos. Dentro de sus ventajas destacan las siguientes: escalabilidad, prevención y accesibilidad, reducción de costos y mayor recuperación de información ante posibles ataques.
Además, al trasladarse a la nube significa que las empresas tienen la oportunidad de consolidar sus datos y organizarlos en una plataforma universal, lo que abre oportunidades para transformaciones digitales más integrales.
Es importante mencionar que migrar a la nube no debe tomarse a la ligera, ya que el almacenamiento de datos de manera convencional puede poner en riesgo su seguridad. Esto se vuelve especialmente grave en caso de robo o interferencia con dicha información.
Para eso, hay que evaluar y planificar según las necesidades de cada empresa. Además, existen distintos tipos de migración, ya sea de una nube a otra, desde aplicaciones o conjuntos de datos, o mediante una salida completa desde un centro.
Una vez que se realizó el cambio, es relevante supervisar algunos elementos, como por ejemplo, el uso de las aplicaciones, ver que realmente se esté optimizando la experiencia de los usuarios e ir actualizando a sistemas más modernos, de ser necesario.
De esta forma, migrar a la nube es esencial para optimizar la gestión de datos en la era digital. Sin embargo, su éxito va a depender en gran medida de la planificación y supervisión continua que se haga de este proceso, siendo la seguridad y la eficiencia las prioridades.
